Wednesday, January 18, 2012

Huyéndole al cuero...

Desandando en mi "paja" de la fotografía me he encontrado más de un amigo al que le ha gustado mis imágenes, algunos me han sugerido que las venda, pero como mi interés en ésta siempre ha sido el de la fuga y no con fines comerciales, nunca le di mucho taller a la idea. Pero como dicen por ahí, "al que no quiere caldo, se le dan tres tazas", de casualidad  apareció una "loca" calificada que vió mi fotografía y le pareció que debía exponerla seriamente. Por consiguiente, me puso a trabajar, a clasificar mis imágenes por colección, a encontrarles nombre y hasta salir a buscar fotos que me faltaban. Lo cómico de todo esto es que en toda esta tarea de reorganizar, redescubrir y "tripiar" con mis imágenes nuevamente, tuve que preparar una galería virtual y así mismo crear una página profesional en "feibu" y adivinen que? Tuve que auto calificarme. No logré encontrar calificativo alguno que me viniera bien, que si compositor, cantante, escritor, director, actor, figura pública y así sucesivamente iba subiendo la parada. Y lo único que estaba más cerca y que todavía me pareció grandioso fue "artista"... Y si ok, estamos de acuerdo que  la fotografía se considera un arte, pero yo ni soy artista, ni me considero un carajo que se le parezca. Así que suave con el cuero a los que visiten mi pagina, que no tuve más opción que marcar eso...Les soy sincera, y digo que esto de exponer me tiene muy entusiasmada, pues me parece súper "cul" que otras personas, ajenas a mis amigos más cercanos disfruten de algo a lo que le he puesto un empeño desmesurado y a lo que le he entregado todo mi corazón, pero eso no quiere decir que se me vaya a subir a la cabeza y ahora me crea cosas...Si creo sin embargo, que el arte de capturar imágenes lo tengo muy arraigado, pero mi intención nunca ha sido que alguien, ni yo misma me considere una artista, creo que la vida o las circunstancias o dios, quien sabe? Me han llevado a descubrir este mundo encantado que me he decidido a compartir con otras personas a través de un papel impregnado de imágenes atrapadas en un marco con cristal, pero que quede claro, que nunca ni siquiera soñé que esto fuera nada más que mi forma de encontrar otros horizontes, descargar energías, volar alto o ser simplemente yo.

Monday, January 9, 2012

"Lo que me Toca por la Libreta"...

He vivido de forma acelerada y bajo pautas que la sociedad hasta cierto punto me ha ido imponiendo, o mejor dicho, yo me he dejado imponer. Empecé la universidad con 17 años y terminé una maestría 6 años más tarde, obtuve la licenciatura en terapia de familia y matrimonios 2 años después, pero de acuerdo a las normas puedo muy bien no ser una persona exitosa en toda la extensión de la palabra. Y es que a mi edad, se supone que "debo" andar haciendo otras cosas, que no son necesariamente concentrarme en mi "paja" de la fotografía, ni en el "viajeteo" por el mundo. Se supone que una mujer con 29 años debía estar casada y con al menos un hijo...Pa que más? Cuántas veces han retumbado en mi cabeza palabras tales como: "Ya tienes una carrera que te gusta, eres monetariamente independiente, lo único que te falta es buscarte marido (palabra que detesto) y tener hijos para ser feliz", "ya es tiempo", "ahorita eres una vieja, que tú esperas?". Tales consejos siempre vienen de las personas menos indicadas para darlos, esas que viven bajo normas muy estrictas, con deseos reprimidos, con miedos, y con una infelicidad que las consume. Y ahora resulta que esas son las mismas que en vez de preocuparse por resolver sus problemas, se meten en los "míos"... Que barbaridad!!! Y ahora me pregunto... Cómo fue que la presión de la sociedad en algún momento me hizo sentir que mi vida andaba mal? Cómo es tan poderosa que logró tergiversar mis pensamientos de forma tal que me sumió en una depresión profunda? Y cómo logró convencerme que era eso precisamente, "lo que me tocaba por la libreta"? Aún no sé, pero digo yo... Quién dijo que para ser feliz, hay que casarse y tener hijos? Y quién dijo que para procrear hay que casarse? Y quién dijo que yo quiero tener hijos? (Y con esto no digo que algún día no quiera tenerlos), Y además, a quién coño le importa? Nadie vive mi vida, ni tiene el derecho de marcarla con pasos que "debo" seguir, yo vivo como me de la gana, y las presiones sociales no pueden dictar mi paso por este planeta, creo yo... Fue difícil arribar a esta conclusión y me costó la perdida de mi padre, una dolorosa ruptura y un camino empedrado con miles de tropiezos que transité durante más de dos años.  Puedo concluir que la vida no viene pintada color rosa, y no se resume en lograr metas profesionales, casarse y tener hijos. No tratemos de convertirnos en guionistas y crear una obra de teatro perfecta, estas solo son producto de la fantasía y la imaginación, así que vive tu vida sin un libreto, al final, y como bien diría mi profesora de matemáticas de la primaria "el orden de los factores no altera el producto". Yo por mi parte, dejé de ser, y no seré nunca más, una persona que vive bajo normas sociales de antaño. Y estoy clara que después de tanta tormenta "lo que si me toca" es ser feliz, como yo quiera serlo. En estos momentos: viajes, musas, fotografía, soltería, alas, obras de arte, tertulias, vinos y cuanta cosa se me ocurra. Porque me da la gana y porque puedo, resumo soy una mujer de 29 años, soltera, sin hijos, exitosa y feliz.

Thursday, January 5, 2012

Mis Alas, sus Musas y sus Demonios...

Puede parecer pretencioso y desequilibrado de mi parte decir que poseo capacidades sobrenaturales que me hacen sentir y ver cosas para otros imperceptibles. Pero no es menos cierto que experimento sensaciones difíciles de describir, así que haré mi mayor esfuerzo para explicarme. Empezaré por decir que siempre me gustó la fotografía, lograba capturar ocasos, lunas y estrellas con mi teléfono que parecían bonitas al criterio de mi ojo inexperto. Al planear un viaje a Europa,  me decidí a comprar una cámara profesional, con el afán de lograr mejores imágenes.  Acto seguido decidí  aprender lo básico para lograr mi propósito de traer a casa la Europa que intentaba poseer por siempre en mi memoria. En mi aventura del aprendizaje descubrí un mundo mágico y desconocido, un mundo en el que cámara en mano, sólo existía el paisaje visto por la mira óptica, sin sol, ni calor, ni lluvia. Experimentaba la sensación de flotar sobre nubes de inspiración, con mis alas que no paraban de revolotear, y que eran capaces de llevarme justo a la imagen perfecta.  Mi cámara funciona como una especie de máquina sin tiempo ni espacio, que me transporta hacia un estado de trance, en el que mis alas alcanzan el infinito, y me hacen sentir poseída por deidades demoníacas, o angelicales, ¿quien sabe? Sólo resta decir que la fotografía cambió mi vida, y aunque esto parezca descabellado, inmensamente demente y hasta contradictorio, puedo asegurarles que me ha traído alegrías profundas, y por medio de ella he encontrado el equilibrio y la estabilidad, y hasta cierto punto me ha salvado de una vida agitada, cíclica y regresiva. Ahora que he conocido ese mundo encantado, sólo deseo que estas criaturas que habitan en mi cabeza y cuerpo, no se alejen de mí, pues ya son parte de mi equipaje, y  las considero imprescindibles para seguir este viaje llamado vida.

Tuesday, January 3, 2012

"A bailar a casel trompo"...


Me decido a escribir sobre este tema, porque me ha tocado muy de cerca ver las consecuencias de permanecer en una relación de dependencia. He visto a algunas de mis amistades cercanas desgarrarse en relaciones, donde ruptura tras ruptura han regresado al mismo punto de comienzo, o peor aún a uno de total involución, pese a los muchos consejos de mi parte y  de otras personas. Trataré de resumir en que consiste el problema y por qué es tan difícil abandonar la relación por completo...

¿Qué es la dependencia emocional? De acuerdo al Dr. Jorge Castelló: un patrón persistente de necesidades emocionales insatisfechas que se intentan cubrir desadaptativamente con otras personas”. La esencia del problema radica en que la persona sufre de una insatisfacción afectiva y  pretende compensarla en las relaciones de pareja. Es decir, la relación de pareja se convierte en la parte más importante de sus vidas, por lo que no conciben su existencia sin alguien a su lado.  

El dependiente emocional se caracteriza por tener relaciones de pareja desequilibradas, en la que sus aportes superan al de sus parejas, así que vive en la eterna falta de correspondencia, con todo lo que esto conlleva. Además, prioriza tanto su relación amorosa que pone en compromiso el resto de sus facetas: su estado de ánimo irá en función de dicha relación, su tiempo se dedicará a la otra persona, sus pensamientos girarán en torno a la aceptación o al temido rechazo del otro. De todo esto se desprende que mientras la relación vaya "bien", la persona puede cumplir con sus tareas habituales, pero si la relación anda algo "mal", pues su estado de ánimo, y su vida cotidiana se ven afectados grandemente, al punto de ser que es incapaz de funcionar normalmente.

¿Pero, y que pasa cuando la relación acaba? En ese momento comenzamos a notar los síntomas más comunes en el dependiente, que se extienden desde la apariencia de angustia,  el llanto continuo o intermitente, ansiedad extrema, sin lograr concentración en otro tema que la ruptura o relación. Debemos comprender que lo que sufre un dependiente, es lo mismo que cualquier otra persona, pero multiplicado por diez. 

La ansiedad desaparece sólo en dos ocaciones, la primera si la ex pareja regresa y pacta una cita de  reconciliación o la segunda, si aparece otra persona que con si misma trae ilusiones de una nueva relación. Ambas, crean en el individuo, un cambio de ánimo casi instantáneo, pasando de la tristeza total a la felicidad eufórica, cosa que defiere con las personas que no padecen de dependencia.

Este tipo de relación se basa en la sumisión, la idealización y el miedo al rechazo y la ruptura. El dependiente en muchas ocaciones, soporta humillaciones, maltratos y se conforma con una relación en la que el otro no tiene interés en él. Estas relaciones son sumamente enfermizas y convierten al dependiente en incapaz de darse cuenta incluso cuando ya la relación esta rota, de los grandes problemas que la definen y que a veces, "es mejor solo, que mal acompañado."

Mencionaré las características más comunes del dependiente, éstas son, la prioridad de la pareja sobre todas las cosas, son capaces de aplazar sus prioridades por darle paso a las de su pareja; el deseo de estar en constante contacto con la otra persona, como por ejemplo las llamadas continuas y excesivas; idealización del compañero, creen que nunca encontraran una persona como "él" y crean un pedestal inmerecido que se levanta encima de sus cabezas; sumisión a la pareja, se consideran y actúan de forma tal que consideran a su pareja superior a ellos; miedo al abandono, sufren de sólo pensar que la persona puede abandonar la relación;  surgen transtornos mentales después de la ruptura, se caracteriza por una depresión profunda  acompañada por pensamientos obsesivos que giran alrededor del mismo tema; baja autoestima, normalmente son personas que no se quieren a ellos mismo;  búsqueda de parejas con razgo determinados, son las características más comunes el egocentrismo, emocionalmente distante, hostil, problemático, posesivo, o una persona con fragilidades emocionales con las que el dependiente se identifica y produce un desequilibrio, al que el dependiente pretende cuidar; miedo a la soledad, un temor profundo a estar solo y inhabilidad de lidiar con el resultado de vivir sin pareja.

La dependencia emocional es común en un 12% de la población, 75% de este, mujeres. Esta cifra es importante porque los dependientes suponen que solo ellos les esta pasando dicho dilema. Es posible curarse de dicho desorden, con ayuda profesional y enfocandose en los siguientes puntos, puede empezar una nueva vida que no incluya una relación enfermiza.
  • Mejorar la autoestima: no permitir que nadie te agreda, o atropelle tu dignidad.
  • Tolerar la soledad: aprender a tener vida propia, aunque sea en pareja. Después de una ruptura es conveniente estar solo un tiempo, para redescubrirnos como persona. 
  • No necesitar de la aprobación de los demás: dar la razón en todo, es un signo de dependencia e inseguridad en la relación.
  • Fomentar el equilibrio: Hay que dar más o menos a la par que el otro.
  • Evitar la idealización del otro: tu pareja es igual a ti, no aceptes orbitar alrededor de él.
Quisiera terminar diciendo que debemos tratar por todos los medios de evitar cualquier tipo de relación, donde escaseen los valores hacia la pareja, el respeto y la  igualdad. En algún momento de nuestras vidas todos hemos actuado de forma parecida, que se convierta en un patron de vida, es lo que debe ser inaceptable. Espero que este espacio siga sirviendo de reflexión y ayuda a aquellos que se identifiquen con el tema. Pienso que las relaciones de pareja deben ser saludables y fomentar   nuestro crecimiento como personas. Creo que hacer un balance de los aportes y del crecimiento que nos proporciona la pareja en cuestión, es el mejor de los  ejercicios. Es mi firme propósito, difundir información en éste mi espacio, que evoque por la importancia de vivir de forma emocionalmente saludable, con o sin pareja.


*Aquí les proporciono un breve cuestionario, si no está seguro de si sufre de dependencia emocional puede completarlo.




Dependencia Emocional Cuestionario





Cuente 1 punto si respondio Falso a las preguntas 3, 7, 8, 13, 14 y 16, verdadero a todas las demas, si su resultado es de 6 a 7 puntos, existen sospechas de dependencia emocional.